Elegir una lámpara para el comedor es una tarea que requiere cierta reflexión. ¡Hay mil opciones! Y seguro que muchas pueden encajar con lo que necesitas, así que vayamos por partes.
El primer tip es descartar los focos, los plafones, los ventiladores y demás. Para mí, la apuesta ganadora son las lámparas de colgar, y si les instalas un dimmer, ¡mucho mejor! ¿Por qué? Pues sencillamente porque son perfectas para crear ese ambiente cálido y de intimidad tan apetecido en comedores y livings, y también porque son las que mejor direccionan la luz hacia la mesa. Este último punto es importante… ¡a todos nos gusta ver qué nos estamos comiendo! ¿O no?
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Dicho esto, aquí va el segundo consejo: asegúrate de que tu lámpara cuelgue sobre el centro de la mesa, no de la sala. O mejor dicho: piensa que tu mesa tiene que tener su lámpara encima. Lo más fácil es que coloques la mesa justo debajo de la toma de luz del techo, pero si, por la distribución de metros, no consiguieras centrar la mesa con la lámpara, intenta reubicar la instalación eléctrica o improvisar un extensor con cadena o cuerda para conseguir el objetivo.
Acertar no siempre es fácil, pero hay ciertas guías que podemos seguir para aumentar las probabilidades. Una vez elegida la ubicación y el tipo de lámpara, lo fundamental es considerar tres parámetros, que son: tamaño, estilo y altura.
El tamaño
Aunque el tamaño de una lámpara no es una ciencia exacta, ten en mente que, en el caso de las de comedor, es muy importante que la lámpara que elijas guarde proporción con la mesa sobre la que está.
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Como regla general, necesitarás que el diámetro sea, al menos, la mitad de la longitud de la mesa. Por ejemplo, si tienes una mesa de un metro y medio, tu lámpara debería ser de unos 70-75 centímetros. Aunque si tienes que salirte del canon, siempre es preferible que destaque por grande que por pequeña.
El estilo
En los comedores las lámparas tienen un gran protagonismo, por eso es importante que la que elijas encaje con el aire que le quieres dar a tu espacio. Si tienes dudas, apuesta siempre por los clásicos. En el caso de los comedores los chandelier son las estrellas indiscutibles, incluso en versiones un poco más modernas.
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Si buscas una opción más moderna, te aconsejo una lámpara de estilo industrial o que en lugar de una sola te la juegues instalando varias, ¡el efecto es impactante! Aquí tienes dos opciones que me fascinan:
Para una mesa redonda, agrupa varias lámparas y cuélgalas en distintas alturas. Puedes escoger lámparas iguales o diferentes, e incluso de distintos tamaños. Conseguirás un efecto dinámico y entretenido al instante.
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Para un look un poco más serio y formal, coloca las lámparas en fila (alineadas). En una mesa ovalada o alargada, asegúrate de instalar un número impar (tres o cinco) para que la sensación sea más natural. En mesas rectangulares y cuadradas puedes apostar por la pareja.
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La altura
Tal vez este último punto te pueda parecer menor, y sin embargo es determinante porque puede marcar la diferencia a la hora de que tus invitados se sientan a gusto. Toma nota: como norma general, la distancia ideal entre la superficie de la mesa y tu lámpara es de 80 centímetros.
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Hay algunas excepciones. Por ejemplo, si tu mesa es redonda, puedes elegir una lámpara un poco más grande y atreverte a acercarla un poco más a la mesa. También la puedes pegar un poco más a la superficie si tu mesa es de vidrio.
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Ahora ya tienes todas las claves para elegir tu lámpara. Eso sí, recuerda que, como en el resto de las piezas, siempre viene bien completar la iluminación con lámparas de apoyo, ya sean de sobre mesa o de pie.
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