Si eres uno de esos apasionados por la decoración, que siempre busca las últimas tendencias para que su casa sea la más trendy del barrio ¡sigue leyendo! Porque, si además eres un Homylover, seguro que te van a encantar estos indispensables.
Son detalles ideales para unirte a la ola de las tendencias más in pero, además, suman una linda paradoja. Y, a pesar de ser exponentes máximos de lo que se lleva, también conservan un aire atemporal, que los convierten en ese tipo de piezas de las que nunca te cansas.
Una banqueta con personalidad
Hace algunos años llegaron a nuestras vidas los tejidos peludos, que de a poco fueron transitando desde las frazadas hasta otros elementos más insospechados, como butacas o banquetas. Tuvieron un auge indiscutible con la entrada del diseño nórdico, con el que se complementaban a las mil maravillas.

Pero los muebles con tapizados peludos se han integrado ya en decoraciones de casi cualquier estilo ¡incluso el tropical, por muy contradictorio que parezca! Los hemos visto como complementos en terrazas veraniegas, en baños tipo boho y en livings muy glam. Por eso, hacerse con un pisito peludo es una apuesta ganadora.
El equilibrio ZEN nunca está de más
Hubo un tiempo en el que la imaginería religiosa estaba reservada a los templos o a las casas de los muy devotos. Las cosas han cambiado.

La imagen tranquila de Buda se ha convertido en un elemento muy recurrente para decorar ambientes apacibles y en calma. Es una de esas piezas que mantiene su esencia espiritual pero que se mimetiza y adapta bien a distintos estilos decorativos.
El rey de la temporada
Si tuviera que hacer un ranking de tendencias estelares pondría al terciopelo como número 1.

Lo que ha ocurrido en el último tiempo con este tejido es fascinante, porque ha pasado de ser un gran olvidado y casi denostado por su asociación con ambientes muy recargados, clásicos y pomposos, a ponerse en la primera línea recuperando todo su glamour, reinventándose y sorprendiendo con nuevas e insospechadas aplicaciones.
Un toque nacional y atemporal
También llevamos un tiempo viendo cómo los metalizados han recobrado su fuerza, especialmente los tonos dorados y cobrizos. Me da mucha alegría que el cobre se haya vuelto a poner en valor, porque además de ser un metal con una gran tradición artesanal, es también un símbolo inequívoco de Chile. Apostar entonces por el cobre es reactivar el protagonismo de algo muy nuestro.

La tendencia no tiene por qué ser siempre efímera, por eso puedes tener una casa full trendy de la que no aburras cada temporada. La clave está en elegir bien los elementos y, con estos cuatro de la lista, seguro que no te equivocas.