Cuando el invierno es especialmente duro y el frío cala hondo, metiéndose por las ventanas y las rendijas de la puerta sin ninguna intención de irse, las estufas y sistemas de calefacción son una alternativa, pero sí o sí terminan afectando al bolsillo.

Si estás aburrido de este sistema, ¡estás con suerte! Encuentra acá los trucos para mantener el calor desde la vereda de la decoración y sacarte la parka dentro de la casa.

1. Alfombras

Los textiles, y sobre todo las alfombras son una de las mejores formas de mantener tu casa calentita y ahorrar energía. Las fibras como la lana o el pelo sintético son ideales para proteger tus espacios de la humedad, y para evitar que el calor se vaya por el suelo.

Además, aportan calidez visual a tus espacios y crean ambientes más acogedores.

Una persona y un perro sobre una alfombra hecha con retazos de tonos grises, café y crema. Sobre la alfombra también hay dos cojines, revistas y un speaker.
Alfombras decorativas | SODIMAC

2. Cortinas

Las ventanas y sus rendijas son uno de los mayores causantes del frío. Por lo mismo, es muy importante cubrirlas con cortinas de telas gruesas o incluso térmicas.

Preocúpate de abrirlas durante las horas de sol y mantenerlas cerradas durante la tarde y la noche. Eso te ayudará a ahorrar energía, mantener tu casa templada y libre de esos terribles “chiflones” de viento.

¿Un tip extra? Puedes tapar las rendijas con cinta aislante para evitar que ingrese el aire frío.

Rincón del hogar con una ventana con cortina velvet azul, que ayuda a ahorrar energía. También hay un arrimo blanco y sobre ella un espejo redondo con marco dorado.
Cortinas y rollers | SODIMAC

3. Muebles de madera

La madera es un excelente aislante térmico. Incluso, algunos estudios han concluido que tiene la capacidad de crear ambientes templados: cálidos en invierno y frescos en verano.

Por esta razón, si tu casa es muy helada, opta por muebles de este material, sobre todo los de mayor volumen como los que están en tu comedor o en el living. Ojo también con los elementos más pequeños, como adornos, lámparas o incluso zócalos. ¡Todo vale!

Mesa de madera oscura que, según estudios científicos, ayuda a mantener el calor al interior del hogar y ahorrar energía.
Muebles de living y sala de estar | SODIMAC

4. Cubrir las paredes

Al igual que ocurre con el piso o las ventanas, las paredes tampoco son un aislante 100% efectivo. Por lo mismo, cubrirlas es una buena alternativa para conservar el calor en las habitaciones: puedes hacerlo con tapices de telas gruesas o, incluso, con algunos cuadros, espejos o decoraciones.

¡La excusa ideal para dejar volar la creatividad y armar tu propio muro galería!

Espacio de la casa con un muro galería, una poltrona beige con cojines rosados y una mesa lateral de madera con una planta y revistas.
Cuadros | SODIMAC

5. Ventilar lo justo y necesario

Finalmente, pon ojo a los tiempos que ventilas tu casa. Presta atención a los horarios con temperaturas más altas en invierno y aprovecha de ventilar tu casa en ese instante. Con 10 o 15 minutos bastará.

Otra buena idea es cerrar las puertas de las habitaciones o espacios que no usas, por ejemplo, el escritorio o la cocina durante la noche.

¿Qué opinas de estas ideas? ¿Cuál estabas poniendo en práctica?

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