Muchos dicen que vivir en pareja puede ser difícil, sobre todo cuando se trata de llegar a ciertos acuerdos en la decoración del espacio. Y es que es un punto no menor: este será el inicio de un proyecto en conjunto, un lugar especial que será el reflejo de su amor y cariño.
Cuando los gustos son similares, todo fluirá y los acuerdos serán simples de encontrar, pero, ¿qué pasa cuando cada uno tiene su estilo muy marcado?
Aquí te dejamos algunos consejos e ideas para que puedan decorar su hogar sin convertir este proceso en una batalla, y así ¡triunfe el amor!
¿Qué estilo están buscando?
Esta debiese ser la primera pregunta a responder al momento de ir a vivir en pareja, y si las respuestas son diferentes, ¡podría ser el primer conflicto! Pero no desesperen, la clave está en que encuentren un punto intermedio o común.
¿Cómo hacerlo?
- Hagan una lista de su top 5 de estilos.
- Luego, compártanla y vean cuál es el que se repite primero. Quizás no será el número 1, pero sí puede ser la opción 2 o 3.
Esta es una excelente manera de llegar a un consenso, ya que es probable que ambos deban sacrificar su estilo favorito, pero de igual forma llegar a uno que les guste a ambos.
Y ojo, que puede ser un mix de dos looks que vayan bien juntos, como el rústico e industrial, por ejemplo.
Por dónde partir
Una vez que hayan decidido el estilo que le quieren dar a su hogar, es importante que busquen algunas referencias o ideas que guíen las decisiones decorativas que tomarán. Pueden recurrir a programas de televisión, revistas, blogs o Pinterest para inspirarse.
Consultar, revisar medios e inspirarse los ayudará a definir los elementos básicos:
La paleta de color, estilo de muebles, y lo más importante, aquello que no quieren integrar en su decoración en pareja.
El proyecto y el presupuesto
Una vez que hayan definido el estilo decorativo, es muy importante que definan un presupuesto para saber cuánto gastarán y en qué cosas. Cuidar los gastos es un aspecto fundamental de vivir en pareja.
Una buena idea es invertir al comienzo, es decir, comprar muebles o elementos de calidad para que duren mucho tiempo y no deban ser renovados cada año.
¿Los más importantes? El sofá, comedor y cama.
En este sentido, lo mejor será optar por piezas neutras o base, que vayan bien con cualquier estilo, por si el día de mañana deciden dar un giro al look del espacio.
Una vez que hayan definido los muebles, vayan juntos a comprar. De esta manera la responsabilidad no recaerá en uno solamente, y las decisiones serán tomadas en equipo.
Ante la duda, blanco
Si a estas alturas aún están en conflicto con los colores, entonces opten por el blanco. Esto aplica para muebles, pero también para decisiones como la pintura de los muros.
El blanco es neutro, luminoso y no le hace daño a nadie. Sobre él pueden poner los colores que quieran y conseguir un sin fin de estilos diferentes.
Lo tuyo, lo mío, lo nuestro
Es probable que cada uno llegue a este nuevo espacio con cosas de sus hogares anteriores. Por eso, es importante que hagan una revisión en conjunto de esas cosas y decidan qué se queda y qué se va. Para hacerlo más fácil y justo, pueden poner un número de piezas máximas por cada uno.
Elijan lo práctico y útil primero, y luego vayan por aquello que tiene un valor sentimental.
El toque extra de estilo lo pueden poner con piezas compradas en conjunto.
Ojo, además, con cómo se refieren a las cosas ahora que su proyecto conjunto es vivir en pareja y construir una historia juntos. Refresquen los términos y pasen desde el “mío” al “nuestro”. Este simple gesto hará que todo fluya de la mejor manera y ambos se logren sentir cómodos y parte de un proyecto en común.
Almacenamiento
Eviten conflictos desde el comienzo por el tema del orden y organización. Para eso, consideren elementos o muebles con espacio de almacenamiento donde puedan dejar todo aquello que no quieren o necesitan que no se vea.
Los canastos y cajas son nuestros favoritos. Pueden ir bajo una mesa, dentro del clóset o sobre una repisa.
Espacios para cada uno
Ya sea una habitación o un pequeño rincón, preocúpense de crear espacios para cada uno, donde se reflejen al 100% sus gustos. Si no hay metros cuadrados suficientes, pueden acordar que sean los veladores, o una esquina en el dormitorio.
Lo importante es que ambos respeten este acuerdo y puedan expresar en este lugar todo su estilo y personalidad.
Decorar y vivir en pareja puede ser todo un desafío, pero estamos seguros que con estos 7 consejos será mucho más simple. Y tú, ¿qué opinas?
Comentarios