Comenzó como una tendencia de personas mayores que, para no sentirse solas, decidieron vivir en comunidad. Hoy es una alternativa para quienes buscan una vida más colaborativa y sostenible.
Se trata del cohousing, una forma de vida que está ganando popularidad en todo el mundo, donde las personas comparten recursos y espacios comunes, pero mantienen su privacidad en hogares independientes.
¿Quieres saber más, desde sus orígenes hasta recomendaciones para llevarlo a cabo? Entonces sigue leyendo.
Qué es el cohousing
El cohousing es un modelo o estilo de vida comunitario donde sus residentes tienen sus propias casas o dormitorios, pero comparten espacios colectivos, como la cocina, comedores, jardines, la entrada o el patio.
Además de compartir gastos y reducir los costos de los servicios básicos, es un modelo que destaca porque sus integrantes se acompañan, mejorando así su salud mental.
Según la BBC, el concepto surgió en la década de 1970 en Dinamarca y comenzó a adoptarse en otras partes del mundo. "Estas comunidades suelen estar formadas por grupos que tienen algún tipo de afinidad, por ejemplo, personas que tienen en común el deseo de vivir juntas en la vejez", dicen.
De hecho, uno de los grandes problemas que enfrentan las personas mayores es la soledad, por lo que el cohousing se presentó como una excelente solución para evitar el riesgo de enfermedades mentales que conlleva la soledad, como la disminución de la memoria y la capacidad de atención.
Si bien esta idea tiene raíces antiguas, se ha adaptado para los tiempos modernos, siendo ideal no sólo para personas mayores, sino para quienes buscan una vida más conectada con su entorno y sus vecinos, logrando un sentido de comunidad más profundo, colaborativo y significativo.
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Beneficios del cohousing
Si hablamos de beneficios económicos, gracias al cohousing los convivientes pueden compartir los gastos colectivos, como alimentos, cuentas de gas y luz, servicios de limpieza, etc.
Sin embargo, existe un montón de otros beneficios de vivir en comunidad. Aquí te mencionamos algunos:
1. Fomento de la conexión social
El cohousing está diseñado para incentivar la interacción entre los vecinos. Las áreas comunes, como cocinas, huertos y terrazas comunitarias, crean oportunidades diarias para socializar, generando un sentido de pertenencia y apoyo mutuo.
Uno de los grandes beneficios del cohousing es que puede disminuir la soledad y el aislamiento.
2. Sostenibilidad y eficiencia
Al compartir recursos y espacios, el cohousing promueve un estilo de vida más sostenible. El consumo de energía, agua y otros recursos se puede optimizar, además de reducir la duplicación de objetos y servicios.
Los residentes suelen colaborar en proyectos como huertos orgánicos, reciclaje o energías renovables, lo que reduce el impacto ambiental.
3. Seguridad
Al vivir en comunidad, los vecinos están más involucrados en la vida de los demás, lo que genera un entorno de confianza y seguridad.
Saber que tienes personas cercanas que pueden ayudarte en caso de emergencia es uno de los grandes atractivos de este estilo de vida.
4. Mejora de la calidad de vida
El cohousing fomenta una vida más equilibrada. Al compartir ciertas responsabilidades, los residentes tienen más tiempo libre para disfrutar de actividades personales o comunitarias.
Además, tener la posibilidad de convivir en un entorno natural o diseñado para el bienestar emocional, con jardines, espacios de meditación y áreas recreativas, contribuyen al bienestar general.
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Recomendaciones para vivir en comunidad
Si estás considerando vivir en comunidad o cohousing, aquí van algunas recomendaciones clave para una convivencia armoniosa:
1. Participación activa
Vivir en comunidad requiere de un compromiso. Esto significa involucrarse en las actividades grupales, participar en las decisiones comunitarias y cumplir con las responsabilidades compartidas.
La transparencia y la comunicación son esenciales para mantener un ambiente colaborativo.
2. Respeto por la privacidad
Aunque la idea del cohousing se basa en la vida comunitaria, también es fundamental respetar el espacio privado de cada persona o familia.
Asegúrate de que todos los miembros de la comunidad tengan la oportunidad de disfrutar de momentos de soledad o privacidad cuando lo necesiten.
3. Cuidado de los espacios comunes
Al vivir en comunidad, el mantenimiento de los espacios comunes es responsabilidad de todos. Crear calendarios rotativos para las tareas comunes, como la limpieza o el cuidado de los jardines, puede ser una excelente manera de distribuir el trabajo de forma equitativa.
4. Fomentar la diversidad
En un cohousing, cada miembro aporta algo único. Fomentar la diversidad de ideas, experiencias y habilidades es una manera de enriquecer la vida en comunidad.
Todos pueden contribuir, ya sea en el cuidado del huerto, la cocina comunitaria o la organización de actividades recreativas.
El cohousing es mucho más que un modelo de convivencia: es una forma de vida que promueve la colaboración, la sostenibilidad y el apoyo mutuo.
Vivir en una comunidad te permite disfrutar de los beneficios de la vida en grupo mientras mantienes tu independencia y privacidad. Así que si estás buscando una manera de vivir más conectada con tus vecinos y el entorno, el cohousing puede ser una opción para ti.
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