Sea con una amiga, tu mamá, tu pololo, una prima o tu hermano, decorar la casa cuando los gustos de quienes viven en ella son diametralmente opuestos es un desafío.
Pero calma, que no todo está perdido. Antes de sacarse los ojos o hacerse la ley del hielo, sigan leyendo, porque acá les dejo algunos consejos que pueden llevar a cabo para que la misión de decorar sea un agrado en vez de un quiebre de relaciones.
Base neutra
Si cuesta acordar en los colores, te recomiendo que escojan una base neutra para los muros y/o muebles más grandes. De esta forma, podrán trabajar sobre un lienzo en blanco y agregar detalles más pequeños que vayan con los gustos y personalidad de cada uno.
Optar por esta alternativa es una buena idea porque comenzarán decorando en “territorio” neutro, sin que ninguno de los dos se sienta pasado a llevar o desplazado.
Las rutinas de cada uno
Es importante considerar el uso que cada uno le da a cada habitación de la casa. Por ejemplo, si uno/a de ustedes trabaja de forma independiente, probablemente utilizará más el escritorio. Tal vez ocurra lo mismo con la cocina o la sala de estar. En esos casos pueden acordar que cada uno decore la habitación que utiliza más, porque -sí o sí- pasará más tiempo en ella.
Esta es una excelente alternativa si no quieres ceder mucho en tus gustos, tener una habitación completa para ti te permitirá decorarla como más te guste. Así, quizás, puedas ceder un poco más en los espacios comunes.
Nuevos elementos
Si las dos personas vivían solas o en otro lugar, probablemente las acompañará un grupo de muebles y adornos. Cuando te vas a vivir con otra persona es importante hacer una lista con todas las cosas que tienen en conjunto y ver si funcionan para el nuevo espacio.
Pueden, por ejemplo, llegar a un acuerdo en que cada uno conserve tres muebles. Así, el resto serán nuevas compras compartidas. Esta es una buena forma para que ambos se involucren en la decoración y así sientan este espacio como uno colaborativo.
Deco ecléctica
Para quienes no están familiarizados con este término, la decoración ecléctica es aquella que reúne varios estilos, sin ser abrumadora, en un solo espacio.
Por eso, si cada uno está luchando por imponer sus gustos, lo mejor sería implantar un look ecléctico, con elementos seleccionados de ambos mundos, que puedan convivir en un espacio de forma armónica y sutil.
Recuerda siempre que el objetivo es complementarse, y que la decoración no termine por transformarse en una lucha de gustos. Conversen, planifiquen y verán cómo serán capaces de unir lo mejor de ambas visiones, transformando sus espacios en únicos e irrepetibles.
¡Recuerda que decorar tu casa debe ser un momento de disfrute y de pasarlo bien!
Cony
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