Las lámparas de pie son todo un plus, porque nos permiten desafiar la iluminación de nuestros espacios jugando con los efectos visuales. Además, su altura es la mejor opción para crear ambientes y aportar estilo a la decoración de nuestro hogar.
El diseño de una lámpara de pie es muy importante, pero también debes tener en cuenta la función que tendrá, durabilidad, el espacio donde la quieres usar y lo que quieres conseguir.
Acá te ayudamos a elegir la más linda, funcional y que se ajuste a las necesidades de tus rincones favoritos.
Pantalla de la lámpara
Existen muchos tipos, grande, pequeñas, redondas, con pantalla integrada a lo largo del pie, con abertura superior e inferior y lámparas con pantalla cónica, que iluminan más hacia abajo que hacia arriba. Lo importante es saber que entre más grande sea, menos intensa será su luz.
Una lámpara de pie con pantalla grande, por lo general circular, dará una luz más ambiental. Además, tendrá un efecto mucho más decorativo que una pequeña.
Otra cosa a considerar es que las lámparas de pie con pantalla ancha crean un efecto positivo en tu decoración, ya que aportan una luz ambiental mucho más acogedora. Por su parte, las angostas son ideales para iluminar un rincón de lectura con una cómoda poltrona.
Flexibilidad
Si la función que le darás será la de dirigir la luz a un punto específico, las de brazo regulable o las llamada lámparas flexo serán tus mejores aliadas. Permiten iluminar zonas concretas, por ejemplo, un espacio para leer o trabajar, facilitando tus actividades con una luz apropiada.
Otro diseño que también se puede considerar regulable son aquellas que tienen más de una luz. Aquellas donde una ampolleta superior puede orientarse al techo para iluminar de manera decorativa y la otra hacia abajo para una actividad especifica.
Las lámparas de pie de mango flexible te permitirán, además, elegir la altura y posición de la luz.
¿De qué está hecha la lámpara?
Es importante que los materiales, así como el diseño de la lámpara, vayan acorde al estilo que quieres implementar. Recuerda que no es necesario que sea igual a la del techo o la de mesa, la idea es que juegues con los contrastes para destacar aún más tu lámpara de pie. Hoy tienes muchas posibilidades para combinar: metálicas, de tela, mimbre, cristal, etc.
También ten en cuenta que tanto le quieres dedicar respecto a su mantenimiento. Por ejemplo, las de metal son mucho más fáciles de limpiar, sólo necesitas un paño húmedo. En cambio, las de tela tienden a ensuciarse más, especialmente, las de tono más claros.
¡Sé práctic@, pero siempre con estilo!
Regulador de intensidad de luminosidad
Otro elemento muy útil que tienen algunas lámparas de pie es el regulador de intensidad, ya que permite nivelar la luz según el espacio o la actividad que estemos realizando y usar una misma lámpara para varias funciones.
Si vas a estar disfrutando de tu serie favorita en la sala de estar, regula a un nivel tenue tu lámpara para ver mejor la televisión y dale el máximo de intensidad cuando trabajas o tus niños juegan.
¿Qué tipo de luz?
Cada tipo de luz otorga un ambiente especial a tus rincones favoritos que deseas iluminar, por eso es importante elegir la adecuada.
Si quieres que tu lámpara de pie ilumine espacios como tu dormitorio, living o comedor, lo ideal es que sea cálida. Te dará esa sensación de relajo, calidez y tranquilidad que necesitan estos lugares. Por el contrario, si requieres estimulación para trabajar, escribir y que no se te cansen los ojos al leer, opta por una luz neutra.
Ten en cuenta todos estos puntos antes de elegir tu lámpara de pie para living u otros espacios de tu hogar. Recuerda que al estar encendida se transforma en el punto focal de cualquier lugar, y cuando está apagada, forma parte importante de tu decoración. ¡Inspírate y revisa nuestro especial de iluminación!
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